Michael (“Mick”) Jagger, nacido en Dartford-Inglaterra el 26 de julio de 1943, es el frontman por excelencia. Amo y señor del escenario, un monstruo de la música que con su performance en el tablado y su vivencia al máximo de todas y cada de sus interpretaciones concita el fervor de sus fanáticos y la admiración del respetable.
El vocalista de The Rolling Stones junto al amigo de su infancia Keith Richards hicieron de un conjunto musical de garaje en el grupo más famoso del mundo del rock, a base de perseverancia, dedicación y una versatilidad que le ha permitido mantener una vigencia de más de medio siglo. Todo un récord de récords.
Su vida sentimental y personal fue tan ajetreada como su desenvolvimiento profesional. Fue así su sonado romance con la cantante afroamericana Marsha Hunt, con la que tuvo un hijo. Pero su primera esposa fue una joven nicaragüense, cuyo nombre de soltera era Bianca Pérez-Mora Macías, con la que se casó el 12 de mayo de 1971 en Saint-Tropez (Francia)
Justamente, es en la turbulenta década de los 70´, en la que los Stones obtienen su mayor éxito, que Jagger haría “noticia” con su detención en Londres por posesión de drogas y posterior ingreso en un hospital japonés por sobredosis de barbitúricos y alcohol.
No obstante, en 1980 conoció a la mujer que le cambiaría la vida y le daría la estabilidad que buscaba: Jerry Hall. Con ella tuvo tres hijos, y fue su mayor soporte en la veintena de años que estuvieron juntos.
Jagger también hizo carrera cinematográfica. Su primera aparición en el cine la hizo como protagonista en Perfomance (1968). Dos años más tarde protagonizó Ned Kelly. En 1992 participó en Freejack. Nueve años más tarde fue el jefe de una agencia de gigolós en The man from Elyssian fields junto a Andy García. En 2003 fue nombrado Caballero de la Orden del Imperio Británico y fue embajador de la candidatura olímpica de Londres 2012.